Proceso mediante el cual se hace el diagnóstico de las condiciones superficiales y estructurales actuales del pavimento, con el objetivo de conocer los daños existentes, las causas de origen y estimar su comportamiento a futuro. A partir del análisis de los resultados, se pueden definir los planes de rehabilitación y conservación óptimos para garantizar la seguridad y confort de los usuarios, así como las condiciones de operación factibles de la carretera.

Dicha evaluación consta de tres elementos principales:

  1. -Evaluación del nivel se servicio, es decir, la condición funcional del pavimento, relacionado directamente con la seguridad y confort que perciben los usuarios.
  2. -Evaluación de la capacidad estructural, es decir, definir si la estructura actual de pavimento capaz de soportar solicitaciones de carga actuales y a futuro.
  3. -Observación visual del pavimento, es decir, identificación de fallas y deterioro.